Ricardo Torres Gavela **
Antecedentes
El inicio de esta breve descripción de lo que es el taller cultural Pedrada Zurda, supone, como premisa, el dar una visión de los hechos que se produjeron en el tiempo que son elementos activos de un proceso vital innegable relacionado con los demás hechos culturales, políticos, sociales, económicos, etc.
Este país en los años de la década de los setenta, sufrió un voluptuoso amanecer que hoy se ha tornado en grave pesadilla: “el mayor desarrollo del capitalismo ecuatoriano y, a su vez, la mayor internacionalización o subordinación de la estructura productiva del país al desarrollo del capitalismo mundial” (José Moncada Sánchez. Nueva Historia del Ecuador. Volumen 11, pág. 74).
Década de dictaduras, dictadura velasquista (golpe de mayo de 1970) y dictadura militar nacionalista revolucionaria (15 de febrero de 1972), cuya cabeza fue Rodríguez Lara quien, a pesar de haberse beneficiado por el boom petrolero, “cedió ante las presiones oligárquico-imperialistas” (Agustín Cueva, Nueva Historia del Ecuador. Volumen 11, pág. 170), “los precios de los víveres se elevaron a un ritmo bastante acelerado superior, en todo caso, a la elevación del índice general de precios al consumidor, que en el lapso de 1973-1974, se incrementó en cerca del 50%” (Ibidem. pág.173).
La guerra de los cuatro reales, gesta popular de intensa lucha contra las fuerzas policiales, violentamente reprimida en las calles, en la Facultad de Medicina de la Universidad Central, en la zona fabril de Quito, fue la representación vital del rechazo, a punte pedradas, al aparato represor de las fuerzas oligárquicas y a sus lacayos uniformados; “al terminar el primer semestre de 1975, la balanza comercial del Ecuador registraba un déficit de 160 millones de dólares…” (Ibidem. pág. 174).
La represión a las protestas contra el alza de los precios de los víveres y del transporte público, llevo a las mazmorras del Retén Sur a muchos campesinos, trabajadores y estudiantes. Torturó a poetas. Persiguió a jóvenes escritores que expresaron su pensamiento escribiendo versos y grafitos de paredes. El poemario intitulado “Mientras Las Cadenas Danzan Sobre El Cadaver” fue confiscado, destruido y, su autor (Ricardo Torres Gavela), tomado preso en julio de 1975 y confinado a las mazmorras del “Retén Sur”.
El epílogo de la dictadura, remozada en enero de 1976 con el mismo condumio humano, fue la bárbara masacre cometida contra los trabajadores del ingenio Aztra, el 18 de octubre de 1977. Sui generis forma de eliminar cadáveres de obreros asesinados: haciéndolos ceniza.
Fundación de la Pedrada
La Pedrada nace, de entre las vicisitudes políticas descritas, en el año de 1978, en tanto grupo de jóvenes testigos del festín dictatorial que evidenció la década e, impulsados por el sueño de dar al trabajo creativo artístico, la finalidad de cohesión gremial, establecer una pléyade de enfrentamiento al continuo avance de una subcultura comercialista, sumisa al poder, entreguista y fatua.
Se funda, entonces, más que una revista de literatura, un movimiento, una rebelión, la expresión artística, ni vieja ni nueva, del emputamiento contra ese mundo de la literatura local, habitado por todo tipo de fantasmas, fantoches, fanfarrones, falsos y falaces: en el chaupi mundo ecuatoriano, las aves fastuosas de la literatura han hecho brillar sus picos dorados, sincronizados a la oportunidad fragante que les brindara el momento propicio, la coyuntura amistosa, la parentela en el cargo.
La publicación inicial del grupo, una hoja volante intitulada “próximamente La Pedrada Zurda” gestada por el joven poeta Ricardo Torres Gavela y María Berrini, el formato lo escogió Jorge García Suasnavas y, sobriamente diseñada con la plumilla de Fernando Loayza, es un llamado a “abrir el cielo”, a “bombardear la propia cobardía”, a “tomar bando”, a “hablar fuerte”, en tres poemas de Héctor Cisneros, Ramiro Oviedo y Ricardo Torres, que se difunden en recitales en las plazas, en hojas previas de anuncio de la llegada del primer número de la revista Pedrada Zurda. La intención principal estaba cargada del deseo de hacer recorrer la idea en todo el país, es así que el anuncio de su llegada aparece en el diario “El Mundo” de Loja, el 7 de octubre de 1978.
En largas y anochecidas conversaciones previas al parto de la revista, se discutió ampliamente el carácter estético del neonato, dándole una fundamentación concreta que devele y denuncie el aspecto aparencial y la realidad empírica, propiciado por el statu quo en sus massmedia y encuentre la verdad, la difunda y se brinde a la consciencia colectiva, para actuar sobre ella. Que señale el carácter de mercancía que impone el capitalismo a la obra artística literaria y que, por el contrario, muestre el arte como una acción de desvelamiento de la realidad que enerva e inflama los espíritus humanos, los dignifica, los revivifica, los alumbra y recrea.
La literatura, en ese entender, se sitúa en una zona que no es neutral, ni estética, ni social, ni políticamente neutral, es, además, la manifestación vital, es la práctica cuotidiana encaminada hacia la solidaridad humana y entrega desinteresada que caracteriza a los miembros comprometidos con esa aventura de mutar las ideas y la creación en piedras incólumes, piedras talladas en letras, piedras preciosamente vitales, y no, letras talladas en piedra.
Marcha obrera en Quito en "la guerra de los cuatro reales"
La CERO
La PZ, plantea el editorial del número Cero, nace independiente de “las siglas existentes, ya sean representaciones de partidos políticos o de agrupaciones que pretenden realizar una labor de difusión cultural de masas y se han limitado a ser provecho exclusivo de elites”; critica “la abulia física e intelectual en la que nos han sumido… los vergonzosos medios de comunicación y su entrometimiento en nuestras vidas”; defiende el arte como “trabajo duro de todos los días, medio y fin de la libertad”; y, al sondear el interior humano, advierte sobre la profundidad del ser que puede convertirse en “asiento de la dominación para luego proyectarla y ejercer la opresión a través de nosotros mismos” .
El colofón proclama “un mundo sin clases, fuera de la resignación a cualquier tipo de autoridad”.
Publicación sin padrinos y sin amos. He ahí el motivo por el cual, se da comienzo a un caminar tortuoso, por un sendero de exclusiones, vejaciones, descalificación, socarronería, emanada desde los cónclaves estables y pensamientos estáticos de la sociedad intelectual del momento.
Los poetas de la Pedrada, escapando a la concentración de esfuerzos en la publicación de la revista, lanzan sus dardos creativos en calles y plazas. Durante los años 1978, 1979 y 1980s se multiplicaron los recitales, en los teatros, en escuelas y colegios, en las sedes de las fábricas, en las plazas y en las calles de Quito, Latacunga, Ambato, Guaranda, Riobamba, Guayaquil, etc. Se difunde poesía, pensamiento, mucha energía y cientos de hojas de poesía entre los pasantes y entre quienes se acercan al cuadro del tinglado callejero. El objetivo es nutrir al transeúnte de poesía y esperanza, llegar con a imagen y la metáfora, más allá de la página leída, llegar al oído atento, hacer ver la poesía y que la palpen.
Los recitales se prolongan y se extienden por los ámbitos culturales progresistas, se organizan períodos de solidaridad con los pueblos fraternos, se presentan, en asocio con grupos de artistas afines, obras de teatro, recitales, foros, etc., hasta colmar con nuestro grito el mundo; la fuerza de acción que lidera la PZ en la capital, conlleva a que las fuerzas sociales presionen al gobierno para la ruptura de relaciones con el tirano Somoza en Nicaragua y se logra recaudar 8.500 mil dólares para el Frente Sandinista de Liberación Nacional, a base de una subasta pública de obras de arte y actos culturales de solidaridad con el pueblo de Nicaragua en su lucha liberadora. Se constituyó en Quito, con miembros de la PZ, el Instituto ecuatoriano nicaragüense, al igual que la Asociación Latinoamericana para los Derechos Humanos, en septiembre de 1980.
La Federación de Barrios de Quito, es el centro del cual nacen numerosas presentaciones artísticas para la población, tanto adulta como infantil. La PZ promueve el teatro de títeres dominical que llegó a tener gran acogida en la ciudad.
La PZ, en Latacunga, trabaja conjuntamente, coadyuva en la gestación y está presente en la inauguración del teatro popular de la Asociación de Trabajadores de la Cultura de Cotopaxi, ATCC, gremio de jóvenes artistas que mantienen en Cotopaxi una línea de acción vanguardista dentro del arte. En la Universidad Técnica de Ambato participa en los recitales por el décimo aniversario de fundación de ésta.
Marcha estudiantil pacifista en el Quito de los 80
LA COMETA
La revista llevaba también, desde su primer número, una hoja volante de colores para infantes, llamada “La Cometa”, un celofán que voló en las bibliotecas de cuantos padres llevaron a casa la revista, para que los niños la disfruten y vuelen con su real imaginación. Su función primordial fue dar a los niños el colorido de la verdad, la posibilidad de mirar sin tamices de engaño el mundo. Las Cometas nacen para proteger los lápices de colores de los uniformes grises y de quienes mataban aves y mariposas del campo con fusiles y escopetas.
La cometa invitó a las criaturas a salir al juego de los trompos y billusos y no pasar el día sentado viendo la pantalla de la televisión. La Cometa les contó sobre los tres califas, triunviratos de maldad, cuya ansia de engullirlo todo, hizo que la gente los expulsara del país. Les hizo conocer al cobarde Push que la noche de navidad mató a los habitantes del istmo de Panamá, y les contó también cómo unos señoritos adinerados se robaron el nombre de La Cometa para su periódico nuevaolero: el periódico “Hoy”.
La Cometa, después, obligatoriamente, se mudó de patronímico en La Cometa Zurda para mostrar su verdadero signo y no ser confundida.
LA 2
En el editorial del numero 2, va “también la pedrada, con íntima enemistad, contra quienes agotan esfuerzos por recetarle amnesia al pueblo …Amnesia para la matanza de Aztra, para el juego criminal con que callaron a Calderón Muñoz, para las pachangas millonarias del caso Tokura, el desfomento de los fertilizantes y la imprevisión de la Previsora.” En las páginas finales de este número se da un detallado informe de acciones, con l título “qué se ha hecho” y se adopta una posición crítica “frente a la acefalía de la CCE”
En este momento el Taller PZ logra aglutinar en su seno a valiosos escritores y artistas que aúnan esfuerzos para continuar con el trabajo artístico literario. En Latacunga se organiza, junto a la ATCC, el primer concurso provincial de poesía y relato estudiantil. El día 26 de abril de 1981, hace exactamente 25 años, se realiza el acto de lanzamiento del libro “Canto de vuelo firme” en el teatro de la ATCC, del poeta Alfonso Chávez Jara, en calidad de miembro de la PZ.
TRES ½
En Mayo de 1981, aparece el número tres y medio, publicación que muestra un importante aporte en el campo de la antropología nacional con los trabajos de José Bedoya y Amilcar Ajbán con las investigaciones sobre la familia Jacho de Saquisilí y los relatos populares “El cóndor y la Margarita” y la leyenda de San Bartolo, la crítica al teatro nacional, en gran medida ausente en el país, llega ser parte de la contingencia de las tablas, en la pluma de Carlos Theus, como Julio Paredes M. Es en este # que el poeta Alfonso Chávez Jara, de quien lleva el nombre este encuentro.
Se incide en la difusión de la poesía y la plástica con los afiches poéticos realizados en serigrafía. Se los cola en las paredes de las casas, en los muros de la ciudad y en las carteleras de instituciones educativas.
LA 44
Publicada en enero de 1984, y manteniendo una política de brazos abiertos para los escritores y escritoras jóvenes, trae nuevos talentos entre sus colaboradores, de entre ellos, nombraré a Leopoldo Tobar, con el poema América Mishqui. Llegan colaboraciones de los países vecinos: de Chile Luis Alberto Tamayo. La difusión de avances poético-políticos se intensificó con los grafitos sobre la calcimina desgastada de cantidad de paredes. La prensa entonces, decide ignorar las actividades culturales del taller y califica la escritura de grafitos como canallesca. El oficialismo cultural gestaba grupos de literatura suave y sumisa al statu quo para entregar en sus manos la “posta” de la pluma y el cetro. Posteriormente, aquellos que censuraron la escritura de grafitos, publicaban antologías del grafito en la ciudad.
LA QUINTA INTERNACIONAL
En marzo de 1988 reaparece la revista, no sin antes haber sufrido vicisitudes extremas, la muerte de un poeta, la deserción de otros, el desfalco de las magras economías de un taller sin padrinos y que nunca aceptó dineros de transnacionales ni municipalidades.
Sin embargo, el taller se enriquece con la colaboración de poetas de otras latitudes y del propio terruño, en este #, una importante colaboración de poetas del taller Matapiojo refuerzan la revista y se publican poemas de Diego Velasco, Pablo Yepez, Ruth Patricia Rodríguez, Diego Gortaire.
Es en este número que Joaquín Regalado comete el pecado mortal de señalar un “singular caso coincidental y una analogía”. Texto acre y contundente que desmenuza la frágil arenisca de los ídolos literarios locales. Pecado imperdonable que repercute acentuando la tirria y el desprecio hacia la PZ, del canto oficialista y encumbrado.
Al cumplirse una década, Javier Ponce escribe en La liebre Ilustrada del 13 de noviembre de 1988: “si algo ha caracterizado a quienes se han quedado en sus filas, es una empecinada, radical posición anti-oficialista, opuesta a toda forma de institucionalización, acomodo o complacencia.”
La revista se internacionaliza, instaurando una quinta internacional del arte.
La revista KHIPU de Munich, hace una reseña de la revista “la publicación sin padrinos, editada por un taller cultural, es una de las revistas más irreverentes, contestarias, chistosas (de humor acre), combativas contra el “establishment” político-social, contra las normas idiomáticas, pero pro libertad sexual, la de la palabra, la de las reales ganas…”
El trimestral literario Molloy, de enero marzo de 1989, editada en Florencia, Italia, acentúa el hecho de la coherencia entre el contexto político específico latinoamericano y la afirmación valiente de expresar y mantener la opinión de los autores de la Pedrada.
El papa Leonino tercero alias "el carnicero"
LA SEXA
Para inicios de 1990 aparece la Sexa , a la vez que se organiza y se pone en marcha el festival IMAPIMUSPO (imagen, pintura, música, poesía ) en la ciudad de Oruro, Bolivia a donde acudió un contingente pedrado a los actos culturales allá realizados.
Cuando muchos de los antípodas de la PZ habían proclamado la muerte de la revista, sobre las cenizas y la tierra del sepulcro, la palabra contundente del editorial decía: “He aquí nuestra libertad, queridos espeluznados. Aquí está nuestra reticencia a lo que denominan deceso las bocas repugnantes del tartamudismo”. Y continúa: “ Ni la zancadilla, ni el truco han logrado vencerla sin ser invencible, ni ménades ni gorgonas con su antefija de odio la han apabullado, ni insultos ni bloqueos ni sarcasmos, han resquebrajado la posición, el intento y la inanulable práctica de manifestar en vida que la poesía emana, cuando lo es, una libertad caudalosa y sin fin…un paisaje claro y solar que entona la ansiada liberación”.
En las páginas de este número las creaciones de poetas andinos retumban y se muestran atestiguando una realidad común y una posición fraterna. Existe un amplio análisis de la
situación de la cultura en el país, en la pluma de Agustín Agualongo, pseudónimo de Fabián Núñez Baquero, frente a la capitulación de la URSS y el paso y conversión de muchos intelectuales de izquierda a la magia o al chamanismo y defiende al poeta Raúl Arias calificando su despido de la Universidad Central como “patada a la Cultura”. Así mismo, Orlando Sierra, verdadero luchador por dignificar la condición humana, reivindica la teoría social marxista, en plena cháchara celebrativa derechista, proclamando la muerte del materialismo dialéctico. Muchos “intocables hombres de letras”, rasgáronse las vestiduras ante la crítica a la “Bienal de novela Ron Caney”.
500 AÑOS
El carácter internacionalista de la línea de la PZ, motivó invitaciones hacia fuera del país. La Contracelebración de los 500 años de la invasión europea al continente americano, atrajo a grupos de vanguardia alemanes como REITER IN, para realizar recitales, actos culturales e instalaciones en la ex RDA, concretamente Dresde, al igual que, invitados por agrupaciones afines, presentar nuestra creación cultural y posicionamiento en la realidad mundial, en el Teatro del Grutli, de la ciudad de Ginebra.
IMAPIMUSPO
La interrelación con artistas de las regiones del corredor Andino, motivó la realización del IMAPIMUSPO en Ecuador. Se realizaron actos culturales en Quito, Cayamburo, Ibarra, Zumbagua, Latacunga. Llevando y adquiriendo el contenido de la cultura de los pueblos del Ande, desde la Patagonia y el Caribe a conjugarse en la Línea ecuatorial. Artistas peruanos, bolivianos, chilenos, colombianos, venezolanos, llegaron a brindar su creación artística durante el período de realización del IMPAPIMUSPO, algunos artistas permanecieron en el país hasta tres meses trabajando en la concreción de un movimiento artístico andino y liberador. La PZ fue acusada, entonces, de querer “senderisar” al Ecuador.
95
En 1996, reaparece la revista con el # 95. El editorial intitula “Por fin el pus”. Se incide lapidariamente contra aquellos que hacen colas largas, a fuerza de sumisión y claudicación de principios, para obtener canonjías burocráticas o empleos en la empresa periodística nacional, a ellos “allí les dejamos todo…. los premios, los papazos, las medias nylon, el éxito de engorde, la fama a la presente fecha, a San Juan, la inmortalidad”. Es un número sencillo pero contundente. Se difunde las barbaridades cometidas contra el planeta y la lucha ambientalista como el Atentado contra el Rainbow Warrior I. Se denuncia la falacia de las pseudo guerritas concertadas entre los gobiernos de turno, Durán Ballén y Fujimori, entre Ecuador y Perú, para ocultar sus patrañas de política interna. Es un número de prosa, exclusivamente.
LA PEDRADA 20 AÑOS
Aparece en 1998 la revista, mostrándose, la revista “a sus 20 años joven y jóvenes sus viejos poetas por siempre, sus incontestables versos son siempre nuevos. El mundo de la pedrada es el mundo de las gentes siempre, de las gentes puras y sencillas, sin tapujos de superpan ni bagajes de extrasupers.” Sobresale en este # la poesía femenina, en la sección “Muchachas malas de la Historia”, la poesía de poetas fallecidos, como Pedro Moreno, Orlando Sierra, Marco Vinicio Poveda, Héctor Cisneros, Roger Kerger, Ingeborg Bachman.
LA INFINITA
La pedrada del año 2001, la “infinita”, fue una concreta invitación a escribir poesía a todos los poetas que mostraran su interés por publicar en la PZ, es así que hubo una participación amplia y el aparecimiento de una nueva generación de poetas, que sin tomar ninguna palito de posta, escribieron poesía; solamente tuvieron las agallas de mostrarse pedrados. Es este # el que denuncia con letra gigante a los traidores Mahuad Wit y Ortiz Brenan por haber entregado el país a la voracidad imperialista Iñaki y haber pisoteado nuestra identidad y soberanía cultural. El editorial, parafraseando al poeta León Felipe, afirma contundentemente: “el arte no es un engaño ni un narcótico para dormir bien, ni una cortina para ocultar el abismo”.
COMPENDIO DE EXISTENCIA
La última revista que vio la luz en el año 2005, lleva una fina selección de textos publicados en números anteriores y las composiciones que fueran hojas volantes, emitidas cual dardos ante situaciones emergentes, como la invasión yanki a Irak. Este número es la muestra mayor de nuestra “inexistencia” para quienes nos negaron aire y terreno. Es, por tanto, la negación de nuestra desaparición: si nunca existimos, nunca moriremos.
En fin, la revista apareció cuando pudo desde septiembre de 1978. La financió la misma gente de la pedrada, vendiendo suscripciones, a base de donaciones de obras de arte de los mismos artistas de la PZ y de artistas fraternos, poniendo del propio peculio.
Las portadas son obra original de artistas plásticos nacionales, en su mayoría, salvo la de la 95 de Maya Najel, artista alemana del grupo Reiter in. Se destaca la obra plástica de Iván Ney.
La tirada siempre se hizo en mil ejemplares. La difusión en librerías, puestos de revistas, venta y obsequio de mano a mano.
Quienes estamos en el taller ejercemos Resistencia a la Exclusión, al Olvido, a la Inconvivencialidad de quienes permanentemente y sistemáticamente han querido apagar nuestra tea. Resistiremos como resisten las gentes de la Mesopotamia al invasor.
Su valor estético y testimonial es innegable. ARCE, Asociación de Revistas Culturales de España, en el censo de revistas culturales iberoamericanas, califica a la PZ como una revista “subterránea, perseguida por el oficialismo cultural”
La PZ es reconocida fuera del país como una publicación de gran significación para las letras latinoamericanas. Se han traducido poemas de algunos miembros a diferentes lenguas. La última traducción de un poema de Ricardo Torres Gavela, se hizo al idioma holandés, en el “Culo” de Amberes: “Culo” revista literaria intercultural holandesa.
Nosotros, queridos panas, no marcaremos hitos en este mundo; marcaremos calavera.
**Ricardo Torres Gavela
Gestor y Fundador de la revista cultural Pedrada Zurda
Ponencia presentada en el I Encuentro de Talleres y Grupos Literarios del Ecuador, Alfonso Chávez Jara, Riobamba. abril de 2006
1 commentaire:
Una cálida felicitación al poeta Ricardo Torres y a todos los miembros de la Pedrada por insistir en mantener la huella histórica o portuna y sagaz de este grupo literario, con su voz universal. Con un abrazo continental, Fabián.
Enregistrer un commentaire